La basura huele. Si hace calor no sólo huele, hiede, y de ahí a convertirse en un problema de salud pública, va un paso. ¿Qué sucede cuando a resultas de una acumulación excesiva de basura surje un foco infeccioso? Qué todos los protocolos habidos y por haber se activan con el objetivo, no sólo de frenar dicha infección, sino de limpiar la zona y, en la medida de lo posible, evitar que este problema se reproduzca. Es evidente que en un país del primer mundo cómo se supone que es España el tratamiento de la basura y las posibles complicaciones que pueden surgir de la misma está plenamente asentado y profesionalizado. Eso creía yo, al menos, pero veo que estoy muy equivocado, pues cada vez que pongo la tele y en particular una cadena que rima con "por el culo de la hinco" veo que nuestros politicastros todavía no se han dado cuenta que tenemos un problema, muy serio además, de higiene pública, en éste caso, mental.
La Audiencia lo puede todo. Esa es la máxima del telenegocio que, en éstos dias de estupiTDT y basura informativa de toda índole nos invade. Cuando Televisión Española dejó de ser la cadena hegemónica y nuevas ¿ofertas? televisivas invadieron nuestro hogar desde una parrilla televisiva que prometia nuevas maneras de diversión todos nos alegramos. Mucho más cuando la cadena amiga nos llenó las pantallas de pechugas a toda hora, algo muy propio del formato italiano de tele lo que sea imperante en Berlusconiland. Después el formato fue rolando, de concursos y cosas pechugoides a basura primero controlada y después mucho más a lo bestia. La cadena de Fuencarral vió que en España la teta tiraba, pero el marujeo mucho más y éste no había que buscarlo. Venía sólo. Sólo necesitabas un famoso, torero o cantante, después la mierda se reproducía y de un mamao que había hecho algo en la vida surgían cien mil que no, que eran famosos por fagocitar, justamente al único que sí lo era.
Así hasta hoy en día. Con la que nos está cayendo, estamos lobotomizados por programas de una textura rosacea y componente interno de excremento rezumante. Basura consistente en convertir algo de nimio o nulo interés en algo de importancia capital. Ejemplos lo tenemos a montones, no voy a dar ninguno en particular. Ya conocemos al cuñado del primo del amigo del representante de la babosa ex-esposa del tipo aquel que haciendo aquello triunfó brevemente durante el verano del dos mil tres. O al fracasado que, precisamente por ver su matrimonio, trabajo y familia hundidos pero justamente por conseguir que, a resultas de éstas circunstancias se ha liado en ese programa de macarrillas y ejem de los medios dias con una gachona que, sin hacer nada en la vida y por el mero hecho de estar muy buena tira de audiencia dándole a los spaguetti lo que quieren, buen share y mejor salida para la publicidad.
Basura por aquí, basura por allá. ¿Es un problema de salud? Al menos mental si, porque en un país donde se va acentuando el fracaso escolar, se incrementan los Ni-Ni y simple y llanamente tenemos un nivel de desarrollo que se hunde por momentos, que estos especímenes se estén forrando a costa de parados y marujonas que pasan la tarde en blanco frente a la pantalla es cuando menos curioso. Curioso por no decir preocupante, pues las cosas degeneran cómo por ensalmo y en éste país, al parecer de mentes débiles, por el calor, supongo, más aún.
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